Decks

Los decks deben ser realizados usando maderas duras, ya que tendrán mejor capacidad de adaptarse frente a los diferentes factores climáticos a los que estará expuestos. Si bien el lapacho es la más noble y recomendada en estas latitudes con una durabilidad estimada en 30 años, la teca, el cerezo africano, el curupai o el grandis también son buenas opciones. Si usáramos maderas blandas como el pino o los eucaliptos, la vida útil alcanza de 3 a 5 años y precisarán mayores cuidados.

Emplazamientos
- Sobre terreno natural: La más fácil pero poco recomendable es montar la estructura directamente sobre el terreno. Para ello debemos nivelar la tierra con las debidas pendientes para evitar estancamientos y lograr que el drenaje se produzca por fuera del área del deck. Un foil especial sobre la capa superior evitara el crecimiento de pastos.
Lo mejor seria hacer una carpeta de cemento pobre de 5cm y pintarla con brea; construir pilotines o columnas de madera tratada, enterradas y elevados 12 cm. sobre el nivel del terreno; o utilizar bloques de Hormigón prefabricados que ya vienen diseñados para recibir las alfajías. Después fijaremos los tacos y alfajías nivelados sobre el sistema de apoyo que hayamos elegido. La distancia entre alfajías recomendable es de entre 35/40cm. Sobre ellas, y en sentido perpendicular, se colocará el entablonado.

- Sobre balcones techados o terrazas: en este caso la estructura se puede montar sobre la carpeta o, directamente, sobre el revestimiento existente. El nivel de piso terminado se elevará entre 4 y 5cm.
Previo a la instalación conviene aplicar sobre el piso existente una mano de pintura impermeabilizante. Se recomienda dejar tapas de inspección en las rejillas y mantenerlas libres de hojas.

Tratamiento de la madera
Todas las maderas deben ser tratadas con una mano de imprimación bactericida y dos o tres manos adicionales de aceite de lino o de teca que deben aplicarse en todas sus caras. Finalizar con varias manos de algún recubrimiento protector.

Si el deck está al aire libre, conviene mantenerlo cada cuatro meses; si se encuentra en espacios protegidos bajo techo, puede ser una vez al año. Hay que limpiar los decks periódicamente con un paño húmedo. Además de estar atentos a retirar en el momento cualquier derrame de líquidos, después de una lluvia es importante secarlos.